La seguridad es precisamente el tema nuclear del protocolo de colaboración firmado ayer entre el Ayuntamiento de Santurtzi y Metro Bilbao. Según el acuerdo suscrito por el alcalde, Ricardo Ituarte, y el director gerente del suburbano, «estos mecanismos de coordinación permitirán un intercambio fluido de información que revertirá en una mayor eficacia de las actuaciones en materia de seguridad, tanto preventiva como correctiva».
El protocolo, similar al que ya firmó en 2007 Metro Bilbao con la Ertzaintza y las policías locales de los catorce municipios en los que está presente, dará libertad a la guardia urbana de la villa marinera para moverse por las estaciones. «Actualmente tenemos unos 80 policías en plantilla y será frecuente verlos por el metro», avanzó el concejal de Seguridad de Santurtzi, Manuel Ángel Seoane.
Precedente legal
«La primera medida en la que será visible la colaboración entre la Policía local y el personal del metro será el intercambio de información, en especial, referente a las próximas fiestas», explicó el alcalde. Ituarte celebró la llegada del suburbano y garantizó la vigilancia «de la que a partir de ahora va a ser la calle más poblada de Santurtzi». Se quiere profundizar así en la prevención, para minimizar las incidencias y «reducir los riesgos a cero». Actualmente, la incidentabilidad es del 0,001%.
Según explicó Rafa Sarria, el metro ha sentado precedente en la jurisprudencia española con la condena de una agresión producida en sus instalaciones durante 2006. «Por primera vez, la ley ha considerado a un supervisor como un 'agente de seguridad en el transporte'», destacó. En Cataluña ya existe también una sentencia donde se ha aplicado este mismo principio.